viernes, febrero 10, 2006

Tu libro.




"A la memoria de Gustavo Malomo, con todo mi amor."



Vos leíste mi libro y tu “Burbujita” no se hizo famosa. Jamás se vendieron mis libros y mis poemas no dieron la vuelta al mundo, como tanto esperabas. Gané pocos premios gracias a concursos ocasionales y de dudosa organización.

Seguí trabajando y crecí… mis superpoderes, mis dotes de heroína y mi capacidad de asombro se fueron desgastando.

Sólo una felicidad la mía, conocí a mis hermanas y a mi silencioso padrino cuando por fin pudimos reunirnos todos en Argentina. Me hablaron de las pupusas salvadoreñas, de política venezolana y de los desolados pingüinos argentinos.

Y recordamos tu nombre. Les conté que mi primer amor se llamaba Gustavo y que jamás se dignó a mirarme. Luego vino el silencio…

Sebastián sujetaba un deteriorado libro de Borges y decidió leernos “La Casa de Asterión” mientras las chicas y yo tomábamos café. Pensamos en la soledad del Minotauro y acordamos que no se parecía en nada a vos. Vos nunca desgarraste las paredes, ni ansiaste un final, jamás estuviste solo. Y no fue si no hablar de vos toda la noche.

Luego, casi al final de la velada, saqué mi libro pues, orgullosa, quería mostrarles la portada. Aquella que hiciste para mí ese 17 de enero en que me diste el éxito que aún desconocía. Los poemas no importaban porque estaban en blanco, completamente vacíos…

Vos leíste mi libro y nadie lo leyó porque no era mío, era tuyo. Fue tuyo desde el principio; jamás hubo algo escrito por mí y tu “Burbujita” supo que te habías ido. Te llevaste cada poema en mi garganta, en mi sangre, en mi pluma. Y luego de estos años sin vos, aún guardo tu recuerdo entre mis manos…

5 comentarios:

nihilego dijo...

(...) Mi siguiente texto aún no llegó. Nunca Llegará. La muerte prohibirá todos mis siguientes textos. (...)

- Tanti Augui a Me, Gustavo.

Ayy Marce. Érase una vez un hombre al que amaba, al que amo. Hoy desperté con un agujero en el pecho, mi corazón esta roto en mil pedazos. Y dolía. El mundo ha perdido un héroe. Te recordaré siempre, hermano.

Unknown dijo...

Ay Marce.... cómo lo vamos a extrañar!!! Ay dios mío...

Alejandro dijo...

Ufff... qué bello. Qué "de adentro" sale todo esto. Gran homenaje para un gran tipo.

Y sin embargo, habrá poesía.

Miguelius dijo...

A nihilego le dije:
"el mejor homenaje para quienes ya no están, es seguir viviendo"

Adiós, Miguelius.

Anónimo dijo...

Hola como estas marcelita, me parece muy lindo tu texto