En Argentina

13/01/07

Buenos Aires es una cuidad hermosa. Anécdotas como la de hoy me harán recordarla no sólo por su belleza y arquitectura. Hoy sufrí la “vergüenza vial”: No pude colocar (como la gente normal -en Argentina, claro-) ochenta centavos en el micro. El chofer se detuvo y lo hizo por mí y casi al llegar a La Recoleta a Vane también se le salió el “buen Tico” con la típica frase: “Señor, ¡Paradaaaaaa!”

También fuimos a Puerto Madero, y quedamos sorprendidas, es precioso. Los diques y la afluencia turística. Las gentes y las flores. Las palomas y los barcos. El aire y la paz que se respiran.